La Marea

¡Hola, Mareados! Como lo vengo tratando desde que inicié con el blog, La Marea no es un hecho aislado ni, mucho menos, poco frecuente: tiende a causar sentimientos, emociones, actitudes y, por ende, prácticas recurrentes frente a situaciones de estrés e incertidumbre .  Sin embargo, pese a que las reacciones físicas y emotivas puedan ser similares, la verdad es que a cada uno nos pasa diferente. Un primer paso, como en la mayoría de las cosas, es reconocer y aceptar tu situación.  Si aún no estás seguro que esto de la ansiedad es lo tuyo, descuida, que con el test de ansiedad , podrás aclarar las dudas que tengas. Un segundo paso, es poder reconocer que  tipo de ansiedad  es el que más se asemeje a lo que te sucede, pero esto no es tarea fácil: a simple vista, todas las clases comparten características similares. Hace falta profundizar más para dar cuenta de que, realmente, las diferencias son notables. Tipos de ansiedad Anteriormente escribí una publicación de m

¡Hola, Mareados! Últimamente me encuentro reflexionando. Hace poco regresaron mis ataques de ansiedad, y no de a pocos. Afortunadamente, siento que cada vez soy un poquito más fuerte al enfrentarlos, como el Dr. Rospigliosi me dice siempre “el truco está en saber y reforzarte que no estás fuera de control”. Estoy tratando de aplicar esa célebre frase en mi día a día, y déjenme decirles que está funcionando.  Ataques de ansiedad A través del tiempo me he dado cuenta que muchas personas confunden a los ataques de ansiedad/ pánico/ crisis de angustia (llámalo como quieras) con otros malestares. Considero importante – seas ansioso o no – poder identificar qué es un ataque de ansiedad y qué no es. Ningún ataque de ansiedad es “cualquier cosa”, es algo serio, es algo aterrador; pero por mi propia experiencia, sé que mientras más rápido pueda identificar lo que me esta ocurriendo en ese momento, podré asustarme un poquito – aunque sea una pizca- menos.

¡ Hola, Mareados! Solo quería comentarles más sobre estos días. Sí, les he dicho sobre los días duros que he tenido la semana pasada más los exámenes que estoy por dar, pero también quiero ponerle paños fríos a esto. Ya sé que he publicado sobre cómo controlar la ansiedad , pero igual. Ustedes saben que cada ola que viene se siente distinta. Distráete Primero que todo, cuando siento que me va a venir uno de esos episodios, trato de distraerme, pensar en algo más . Me concentro en lo que estaba haciendo y si es eso lo que me está haciendo mal, pues abro Instagram o me pongo a leer un libro como ya les comenté en Lección #17 . Es como procrastinar con los trabajos, pero con La Marea. No les mentiré, después de tantas veces, ya no funciona mucho conmigo. Bota la mala vibra Les cuento que fui a clases de yoga un par de veces, porque el Dr. R. me lo había recomendado. Ya sé que el cuerpo y la mente deben estas sanos y esas cosas, pero no me las creía. Au

¡Hola, Mareados! Sé que nuestros pensamientos son poco comprendidos por la sociedad. Hay situaciones, sensaciones , sentimientos que nadie podrá entender por más que nos matemos explicándoles nuestro estado actual.  Los ansiosos , como nosotros, nos enfrentamos a momentos complicados y a experiencias que pueden asustarnos enormemente. Hace poco intenté explicarle a un amigos sobre mis ataques , pero lo único que conseguí fue una burla para nada hipócrita ni fingida.  Así que frente a este tipo de bullying hacia mi sentir he decidido decir ya no más , y aceptar que hay cosas de ansiedad que solo nosotros y los doctores podrán comprender. Las he enumerado para ti si recién estás en el proceso de aceptar esta nueva etapa en tu vida o si eres un nuevo mareado en esta comunidad.  Atentamente,  La Marea y yo. Infografía: Cinco cosas que solo los ansiosos entendemos   

¡Hola Mareados! Hoy tengo un día tranqui, pero tranqui porque no tengo nada que hacer hoy. No tengo examen hasta pasado mañana, no tengo que trabajar, ni siquiera tengo que pasear a mi perro hoy, pero aún así siento que me falta algo o que algo debo hacer. Esta sensación es propia de la marea, te hace sentir de una manera que no te deja descasar.  Pero te cuento que encontré el consejo más simple pero a la vez más complicado: Hacer algo. Suena tonto, "hacer algo" pero es la manera más fácil de mantener tu mente despejada y relajada.  Les dejo algunas actividades que pueden hacer en este caso: 1. Pinta Pintar es una gran idea porque puedes plasmar tus pensamientos y emociones y así sentirte más descargado.  2. Baila  ¡Descarga esa energía y no pienses en nada más! 3. Lee  Si quieres una actividad más tranquila, leer es una gran opción. Leer te ayudará a llevar tu mente a otros mundos.  Así que ya saben, encuentren esa actividad que les gusta  Atent

Continúa el juego... Comencé a jugar con mi mente. Empecé a pensar en Cucú, si no se acuerdan quién es revisen nuevamente mi  Lección #2 Malas ideas Comenzaron las historias nuevamente, imparables e insoportables escenas comenzaron a surgir en mi cabeza en torno a mi ex. Preguntas y más preguntas. Imaginé mi futuro lleno de soledad, incomprendido y al borde de la depresión más oscura por no haber aprovechado el momento que tuve con una persona para aprender a amar.  Primera tarea de la lista hecha.  La Marea empezó a subir lentamente. Sentía  como mi corazón se aceleraba, el aire empezó a faltar, mis ojos comenzaron a divagar de un lado a otro, mis manos sudaban y se movían sin control.  Falta de control  total. La Marea me había  invadido y se sentía espantoso. Tenia todo el baño para mi solo y aún así el espacio se quedaba chico, me ahogaba. Listo, la segunda tarea de la lista estaba en camino. Ahora debería empezar a bajar La Marea sin el uso de los c

¡Hola Mareados! Recordarán que en mi    Lección #16  les comenté sobre las pastillitas que me dio mi superhéroe, mi Dr.R, mi querido psiquiatra. Pastillas las cuales adoré por varias semanas ya que realmente me ayudaron a bajar la cantidad de ataques que tenía diariamente. Adicción a mí  "No tomes más de dos al día" Y yo muy obediente tomaba sólo dos al día en cada episodio. Al inicio no confiaba en mi y tomaba una en el primer ataque durante la mañana y guardaba otra por si llegaban mis padres a alterarme y subirme La Marea. Pero luego me di cuenta que en las mañanas mi nivel de ansiedad era bajo en comparación a mis tardes y noches, así que empecé a tomar las dos en ese momento, me ayudó muchísimo.  Lo único malo de todo es que me sentía relativamente adicto.  Tomaba todos los días, es decir, todos los días tenia ataques. Esas pastillitas tenían algo que me hacían sentirme bien y esperaba que La Marea llegue para poder tomarlas y tirarme a la cama a esperar c

¡Hola, Mareados! Los exámenes, ya están acá. Me encantaría decirles que, especialmente esta semana, pude seguir todos los consejos que el Dr. R me dio con tanta paciencia, pero como ya sospecharán, eso no pasó.  Pero ¡tranquilo! (como escucho en cada sesión últimamente) que hay pasos a seguir y todo saldrá bien  En fin, me pareció gracioso comentarles mi odisea en mi  semana   primer día de exámenes: Paso 1 que traté de seguir: ¡RESPIRA! Ya, parece fácil, si no lo hago me muero. PERO NO GENTE, no es tan fácil. Resulta que el truco no está en olvidarte en respirar (obvio) sino en la velocidad con que lo haces. Por ejemplo, cuando respiras ya muy rápido, level Cars, significa que te estás hiperventilando. Te pongo la definición "científica":  la hiperventilación es un tipo de respiración rápida, agitada, suspirosa, que da lugar a un exceso de oxigenación y provoca la reducción drástica de los niveles de dióxido de carbono, situación frente a la que el organ

¡Hola, Mareados! He aquí, yo, de nuevo para contarles que las cosas no han ido nada bien (que inusual). Que aquello que consideré útil en aquel momento, no me sirve más. No lo malinterpreten, no he tenido un ápice de intención de darles información errada. Es más, no es que lo sea, sino que cuando uno entra en el terreno volátil de los ataques de ansiedad , las reglas del juego cambian rotundamente. En algún momento, les hablé de cómo combatirla y créanme, aquellos consejos me ayudaron un montón cuando La Marea no pasaba de olas. Sin embargo, tras estas no se encontraba la calma, sino muchas otras que te embisten sin tregua alguna: arremetidas de pánico y brisas de angustia configuran este nuevo ambiente. Angustia El día a día, de por sí, no se pinta nada reconfortante, por ello trato de evitar situaciones y surco caminos para que, de lo posible, no me tope con La Marea. Fracaso, claro está. Más aún, cuando se aproximan las fechas de exámenes y, junto a estos, la tan